El cielo por mi, puede esperar.

Si hubiera o hubiese cielo estoy seguro de que me esperara, nadie, absolutamente nadie está libre de pecado, pero a ver están los pecados y los pecadillos. No es lo mismo comer carne un viernes santo que comer carne un viernes santo de una persona que has matado tu mismo... no... no he comido carne humana ni he matado a ningún humano ¿seres vivos? Si, alguno ha caído pero más que nada han sido accidentes mientras conducía se me ha atravesado un perro un pájaro un conejo y alguno más, ¡no todo a la vez claro! El tema de los insectos no lo voy a tocar, ¿quién no ha pisado una hormiga sin darse cuenta mientras va caminando por cualquier sitio? Porque si hormigas las hay en todos lados. Una vez de pequeño me fui con la familia a un rio a pasar el domingo hacíamos barbacoas los niños jugábamos por el campo y a la orilla del rio o bien con alguna pelota que se llevaba algún primo, en una ocasión uno de los primos se llevo una escopeta de plomillos, estaba vieja, oxidada y le faltaba la culata, tirábamos a latas, piedras o limones, blancos fáciles e inmóviles, le pedí la escopeta a mi primo y me fui de “caza” después de varios intentos... le di a un gorrión el cual cayo al instante, (otro día contare con más detalle como fue la “misión caza al gorrión” acción de la cual no me enorgullezco pero paso) llegue donde estaban todos exaltado -!mirad lo que he cazado¡ dejádmelo aquí que me lo voy a comer después- claro yo había cazado y quería comerme lo que había cazado esa es la ley del cazador, mata para comer, me fui a continuar con la cacería pensaba en que llegaría con muchas mas presas pero no conseguir cazar nada mas parece que los pájaros me vieron y se escondieron hasta que me fuera, resignado me fui de regreso al “campamento” para hacerme mi única presa a la barbacoa y comérmela, cuando llegue no estaba me dijeron que se la habían comido... pero estoy seguro de que la tiraron... por su culpa me convertí en un cazador furtivo... quebrante la ley del cazarro.

Bueno lo del cielo que me voy por las ramas, que pienso creo o sería justo que la entrada en el cielo fuera por las buenas acciones que has hecho y si has hecho alguna mala es con validable por una buena, si no voy a devolverle la vida al pobre pajarito (además ya tuvo su venganza después de su muerte, ya lo contare a la vez que “misión caza al gorrión) pero si he dado de comer a muchas palomas y pájaros en general, a veces he ido a bares donde los pájaros se acercan un poco mas y les he dado también, en una ocasión un par de gorriones querían pagarme la mitad del menú por que se sentían culpables de que yo no fuera a comer, no accedí a tal oferta pero fue un gesto muy generoso por parte de ambos, y no cuento a los pájaros y animales en general que están en los zoológicos, dar de comer a un animal en un zoo es mas un entretenimiento que una buena acción.

Pues eso que si hay cielo tengo mi conciencia tranquila, porque si alguna vez hice alguna acción mala, luego he hecho muchísimas buenas.